anclado, mal, pensado.
Es la mirada burguesa
De las damas, y las duquesas,
De las señoritas que lloran
Y sus lágrimas se estiran
Nos dañan,
como dañan
Tantas cosas otras,
¿Quieren construir una familia?
¿Quieren un pasto verde?
¿Quieren un espacio sutil donde domesticar emociones?
Las emociones no descansan,
¡Domesticar emociones!
Después querrán la receta del calmo mar.
¿Quieren recetas?
Pues notas tomen,
Agreguen una total falta de conciencia,
una desconsideración por lo elemental
un gesto adusto
y sobretodo: levanten su meñique cuando tomen el té.
Tú, mujer, que apenas conoces la gracia,
y vives en la completa
ignorancia de lo que a tus pies se somete.
Tú, mujer, errante, equívoca, díscola,
será tu altar un hombre si no ponés atención a mis palabras,
desordenadas, transfiguradas,
pero también será tu tumba, tu propia tumba.
(Son solo palabras, consonantes y vocales ordenadas)
si no ponés atención descubrirás tarde
el poder de la espada más filosa: ¡La lengua!
Te darás cuenta, que la virtud no habita la posesión,
¡la virtud es un arte de uso!
1 comentario:
¡Maravilloso! hacía tanto que no pasaba por acá que ya me estaba olvidando...
¡salú!
Lucía
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