Tranquila,
brindare en tu ausencia, por tu ausencia
sacudiré ropas viejas y usare las mismas palabras
para callar lo que siempre callaba
brindare a copas llenas sin tu presencia
y cuando tu nombre se apague, aun sere

sucumbirán las hojas del árbol triste
quedara barriendo el recuerdo aquel
agradeceré a las manos que talan los árboles
para que hagan los papeles que trafican palabras
y escribiré con tintas de sangre en esos papeles.

Saldré a gritar al viento agitando las manos
y seguira siendo el recuerdo lo mismo que paso

Pasara casi desnuda, la retirada de los años
Cambiaras una vez, y quien sabe porque, otra vez
de manos que envuelven tu marco de mujer
y aun así seguiré recordando...